Gritar, aveces, es necesario. Pero hoy soy muda.

jueves, 23 de septiembre de 2010

La cria del desierto, muere.


 Tal vez, aquella mañana no tenia de que comer.

¿Porque llora? sin aliento desvanece...
se desvela, su estomago ruge como bestia,
el ogro hambriento deteriora su ente.

Tiene sed de amor, de cálidas palmas y frutos
espontáneos. El respeto por su conuco se ha ido.
La sed de hambre inunda su materia, le aflige 
la sal salada de su tierra y el engaño vil
de su esclavitud.


El grito absurdo de su garganta no se escucha,
es como si las hormigas le comieran
los huesos flacos y secos.
la piel agrietada de su juventud, mas vieja
que hace tres siglos atrás. 

Los mismo donde nunca nadie busco esperanza,
los mismo que se apagaron, como 
el sol en lo hondo del océano.
Su rey esta muerto, su hermano también
y él, en segundos de sosiegos, muere en brazos de su madre.

1 comentario:

Gabriela dijo...

Esto me suena a Cien años de soledad.