
Eres como eres.
¡Silencio!, el mar esta sonando, la serenata de las doce,
la de media noche. El cielo oculta a la luna, y la luna esta allí.
Se esconde, suspira.
La luna si esta ahí. Pasiente sin pies camino,
sin alas vuelo al infinito.
El mar me sopla al oido, me dice que
Poseidon se ha ido.
Callo, escucho, el mar esta sonando.
No se vaya rey de las olas.
Claridas aguas de color rosa, el mar aveces,
es maravilla. Con el cristal incustrado en sus arenas,
el mar es vida.
Emerge sustancia marina, canto de ballena,
mirada de delfin. Poseidon levanta fuentes
con su tridente, atraganta navios
y naufragos perdidos.
¡Poseidon!, yo te amo.
Tu naturaleza me embarca, enamora mi
alma gitana, ¡Poseidon no me voy!.
Neptuno me necesita.
Arena en mis uñas, lenguas amarradas,
mi saliva sabe a sal, la tuya Poseidon a hierro,
a carne cruda. Se hunde el navio, alguien
necesita salvar su vida o un artefacto para respirar.
La noche es criminal, perfecta, solitaria, macabra.
La noche ve a la victima. Se hunde.
El mar esta sonando, la serenata que aprieta
mi obligo, mi garganta, la de soslayo.
Hoy se hunde, se hunde, se hunde y duele.
Y por tantas veces te pido,
¡Necesita un Navio!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario