Gritar, aveces, es necesario. Pero hoy soy muda.

domingo, 27 de junio de 2010

Querido Hidalgo

En el tren, en la embarcacion, en las rocas, en el agua
pienso en usted.
En el cielo, en las estrellas, en la alfombra, en las cortinas
en el espejo esta su reflejo.

Menguante esta la luna cuando la noche es usted
mayusculas son las estrellas cuando sueño Y vuelve usted,
de no saber que escribir en este medio roto papel
de papiro, del ayer.

Es como historia de cuentos de libros, de un suceso
vivido y aun mas querido y es usted.
tal  vez sin alas volando como plumas al viento,
tal vez sin tiempo esperando el encuentro.

Encuentro que es solo recuerdo de tener en  mis manos
lo más sublime y bello.
encuentro que quiero, encuentro que no encuentro.

Lanzar una botella y una nota al mar con esperanza de que
usted la pueda encontrar buscando en ella
lo perdido, lo amado, lo querido.

Hablando sin palabras con tan solo las viejas miradas
que aun añoran lo desconocido
amandole en lo mas lejado
nandando para alcanzarle.

¿Donde se ha ido?, no usted, si no ella, la flor de las
arenas, la flor del alma,
la flor de risos negros,
la flor del sol y luna,
la flor de sus ojos cafe
la flor perdida en el tiempo en el que yo estaba muerta.
Nuestra flor.

Querido Hidalgo, a mi lado, a su lado, me despido de un encuentro vano
de un deseo estéril y de nuestra flor perdida...

No hay comentarios: