Gritar, aveces, es necesario. Pero hoy soy muda.

miércoles, 12 de junio de 2013

No me saques de ti.




Querido.

Pero el amor no esta en todas partes,
no anda flotandando sobre nuestras miradas,
ni es un niño semi desnudo con arco y flechas
mucho menos un corazón muy rojo de papel
maché. Yo no sé que es el amor pero juré
tantas veces quedarme aquí, estudiándote
la mirada, mientras comemos pan con
mayonesa todo el verano, la época de
las campanas de viento y las frutas amarillas.

Y no sé en que paró mi juramento, se lo
han llevado el viento, se lo tragó el tiempo,
y con esas alas que juré prestarte se escapó
de mis intenciones. Esas que tenía de abrazarte
mientras daban las cinco de la madrugada,
esas que cultive con toda imaginación para
hacerte sonreír, pero casi siempre
termino buscando la salida como si tuviera miedo
de ti o como si ya no me importara nada.

Le pido que una vez más disculpe mis 
culpas ignorantes, mis vagas ignorancias 
que hacen olvidarme de que en
 tus uñas y en tus venas está mi sangre.